YA NO PUEDEN USAR EL DEPORTE PARA SU PROPAGANDA

Cuba: Fin de la hegemonía política en el deporte
Héctor Julio Cedeño Negrín

28 de agosto de 2008

La Habana – www.PayoLibre.com – Aquellos años de la tremenda gloria deportiva, aquellas prodigiosas cosechas de medallas y aquellos aplausos delirantes, cada día van quedando atrás en el lejano recuerdo. Es muy difícil mantener un miserable país del cuarto mundo entre los medallistas del primer mundo.
Los subsidios desaparecieron con la U.R.S.S. y cada vez cuesta más una medalla. Hay que dar mantenimiento a las maltrechas instalaciones deportivas, y los deportistas y entrenadores viven en pésimas condiciones. El patrioterismo de otros tiempos no da para más, y aunque, no sólo de pan vive el hombre, tampoco de comer tierra.
Algo que conspira contra el medallero cubano es que en otros años, los profesionales mal pagados de todos los deportes en Cuba, competían contra los verdaderos amateurs de todo el mundo, pero ahora los deportes en la mayoría de las disciplinas se han profesionalizado, y se le acabó el jamón a la Delegación Cubana. Además, la sobre explotación de los deportistas del patio está provocando el éxodo masivo a otras ligas que pagan mejor y los tratan como personas. Por eso cada vez, se incluyen más perros en las delegaciones de Cuba y ahora suman las cadenas, para evitar el escape.
Verdaderamente, en todos estos años la política deportiva del país ha estado dirigida desde las más altas esferas del poder.
Junto a la salud pública y la educación, el deporte ha constituido uno de los principales elementos de la propaganda política de la dictadura. Las notas del himno nacional y la bandera tricolor de la estrella solitaria han sido el estandarte glorioso del “Cuba va”. El podio de los eventos, abarrotado de cubanos, el ascenso de la bandera y las bellas notas, llamando arrebato, enardecían al cubano y a la admiración del mundo. Pero todo se está desmoronando y va surgiendo el “Cuba fue”.
Habría que ver si el nuevo representante de la “Dinastía Totalitaria” está dispuesto a gastar millones de dólares preparando deportistas, no ya de éxito, sino del éxodo.
La solución es, la despolitización del deporte, el fomento de la Sociedad Civil, que es el pilar del desarrollo deportivo en las naciones libres, el imperio de la Libertad, la Democracia y el respeto a todos los Derechos Humanos. Sólo así retomaremos, verdaderamente, la gloria deportiva y de todo tipo, que merecemos los cubanos.
CAMPAÑA CUBANA POR LA LIBERTAD DE LOS PRISIONEROS POLÍTICOS
"Acuérdate de los presos como si tú también lo estuvieras".
Hebreos 13-3